Sueños Mezclados

Las últimas noches sueño más de lo acostumbrado; tal vez mi empeño sumergido en vencer el insomnio entre almohadas y recuerdos. Es en ese estado semiconsciente, real y ficticio, donde a veces, me despierto dando un golpe de reflejo, o donde a veces ya soñando descubro que sueño, aprovechando al máximo ese segundo de omnipotencia e impunidad.

Soñar con Cuba no es una novedad; sería raro que si la pienso todos los días, no la sueñe casi todas las noches. Lo realmente extraño y tenebroso, es que en estos últimos ejercicios, inconsciente (de que otra manera sino) he mezclado desprolijamente y a pierna suelta, geografías, contextos y personas.

He soñado una Avenida Rivadavia que cruza Marianao, una Rampa que termina en el Obelisco, un malecón en el Rio de la Plata. He soñado todo eso y más; y me he asustado bastante.