El Reloj

Un buen día –hace como dos semanas –apareció ahí. De pronto, inesperadamente, en la esquina de 23 y N en La Rampa. Surgió como por encanto. Nuevo, rojo, bello, imponente.
–Bellllo reloj –expresó macanudamente un periodista uruguayo que pasaba por ahí.
–¡Vaya!¡Qué vacilón! –dijo el chofer de la ruta 22 que frenó junto a él.
El chofer, que venía adelantado en su itinerario y, por tanto, traía la guagua arrastrando una pesada ancla, aprovechó y consultó la hora. Las 10 y 15 p.m. ¡Imposible! Si el sol estaba todavía que rajaba las piedras «Mmmm… ¡qué onda más rara! ¿Cuál será la envolvencia de ese reloj?», pensó el chofer.
Ése es el tremendo, insondable, profundo e indescifrable misterio. ¿Cuál es la envolvencia del nuevo, bello, rojo e imponente reloj de La Rampa?¿Qué onda trae?¿Qué hora da? Porque eso sí. Dar hora, da. El nuevo, bello, rojo e imponente reloj de La Rampa no está parado. El monstruo camina. Las manecillas se mueven, giran, lenta, suave, dulcemente. Y dan la hora.
Pero es una hora misteriosa, mágica, intemporal, envolvente.
La gente pasa, mira… y se detiene curiosa, atenta. Asombrados unos, nerviosos otros, sobrecogidos, inquietos, expectantes. Y se arremolinan bajo el nuevo, rojo, bello e imponente reloj. Y surgen, inevitablemente, los puntos de vista, las explicaciones, las discusiones, las tesis.
Una señora explica:
–Ya sé, ésa es la hora en que van a dar los turnos por teléfono en el Polinesio ¡Ay, con lo que me gusta el arroz frito con faisán!
–No, compañera –le aclara un hombre de mediana edad, –ésa debe ser la hora de Italia. ¿Usted no ha visto que enfrente está la Exposición Industrial Italiana? Es lógico, ¿no?
–¡No, locos! –grita un poeta, que está en la onda de la antipoesía –¿pero no se dan cuenta de lo maravilloso que es ese reloj? ¡Está dando la hora de las musas de ahora! ¡La antihora!
–El loco será usted –responde un psiquiatra que se ha unido al grupo. –Mire, ésa debe ser la hora del Meridiano de Greenwich, que es por la que se guía Prensa Latina que está en la esquina.
–¿Y no será la hora de Australia? –pregunta otro. –Como el MINAZ está ahí mismo, pues a lo mejor es por la onda del corte de caña australiano y eso. Vaya, digo yo…
–No, no es eso. El reloj, simplemente, da la hora que le da la gana. Y así es como debe ser –dice sonriendo un despistado con tendencia anarquista.
¿Será el ICAIC que estará filmando una película de ciencia ficción? Una bolá de Ray Bradbury, Iván Efremov… ustedes saben como es eso.
–No, hombre, no. ¡Ja, ja, ja! –rie un humorista, –¿pero no ven que es magnífico? ¡Pero si es una broma genial! Lo puso en hora Charles Chaplin, Harlod Lloyd… ¡ja, ja, ja!
–Compañeros –apunta un profesor físico-matemático con cara de ecuación de tercer grado, –la cosa no es de risa. Tiene su explicación lógica y científica. Evidentemente, como es eléctrico, sufrío un accidente. Ahora, simplemente habrá que calcular cuantos accidentes más se necesitarían suponiendo que el wattage del pico se mantenga en la misma variable de intensidad… pues se necesitarían… es realmente un problema realmente sencillo para una computadora, pero así, grosso modo, pudiéramos calcular…
–¡Caballeros, no se rompan más el coco! ¿Ustedes no se la llevan? ¿No filtran como es la envolvencia? Lo que pasa es que se han olvidado de ponerlo en hora. Ese reloj lo que está dando, vaya, lo que está dando es la hora de la envolvencia.
H. Zumbado; Marzo, 1971 (Limonada, 1978, Letras Cubanas)

4 comentarios:

CAMILO2002CL dijo...

Jajajajaja..,

Me acuerdo que LIMONADA fue un libro de cabecera en la casa, cuando era chama.

Zumbado era un vacilon.

Antillana del Mar dijo...

Se me han salido un par de lagrimitas ... primero gracias por dejar tus huellas en mi blog ... y ahora decirte que conozco a Zumbado desde que tengo uso de razón, visitaba mi casa de 19 y 46 playa, porque era muy amigo de mi mama y porque además quedaba muy cerca de la de él en 42 y 23, Zumbado Zumbado, mira ese es un ser que te marca para toda la vida. En pleno perídodo especial, en apagones, se aparecía en mi casa muy borracho como siempre, tarareando el tema musical de Casablanca, el cual yo nunca identifiqué hasta muchos años después, yo era muy niña pero me caía muy bien, a mi y a mi hermana nos hacía reir mucho. Nos decía siempre en su borrachera ... tu tener 20 años, y yo apenas con 10 añitos me reía a carcajadas,cuando cumplí los 13 me regaló un libro con la historia de Clementine, que es un personaje de cómics americano, estaba en inglés, pero por los dibujitos yo pude ver que Clementine era una chica norteamericana muy put... e ingenua .... asi al estilo de la Marylin .... hablé con él varias veces antes de venir para acá, porque me llamó diciéndome que en mi casa estaba el manuscrito de un libro de el que le iban a publicar y tuve que llevarselo a casa de unos amigos de él que vivían cerca de mi casa ... cuando eso mi mamá llevaba un año viviendo en las Vegas y el aunque lo sabía siempre me preguntaba donde estaba mi mama ..... yo le decía que en las Vegas y se reía mucho, y tarareaba el tema de Casablanca y decía, casino ... wisky ... en el enorme Librero que había en mi apartamentico de 19 y 46 en el pasillo de la parada del P4, siempre yo encontraba postales que el le regalaba mi mama y a veces le escribía poemas, le decía a mi mamá que era Olga la tamalera, porque mi mamá se llama Olga Lidia, recuerdo tambien las veces cuando mi mamá me llevaba a su casa, me llamaba la atención ver las paredes llenas de fotos muy locas, y también me sorprendió ver a Zumbado sentado a la mesa preparando cigarros con una cajita que tenía un mecanismo especial para esto, era muy gracioso ... Zumbado , no sé ni donde dejé el libro que él me regaló, es una reliquia, pero lo debo haber dejado en mi apartamentico de Playa, en algún rincón, olvidado, ahora siento nostalgia y quisiera tener ese libro con su dedicatoria y todo, gracias por dejarle ese espacio a Zumbado, a mi me ha traído muy buenos recuerdos, gracias por este rayito de sol que me has dado el dia de hoy, aqui donde estoy , llueve mucho, besos de Patricia

CAMILO2002CL dijo...

Concho, Antillana, al que se le erizaron los pelos ahora fue a mi.

EL NIETO DEL MAMBI dijo...

ZUMBADO FUE ALGO MAS QUE HUMOR, FUE UN RAYO DE ALEGRIA DENTRO DEL RIGIDO HUMOR SOCIALISTA DONDE MEZCLO LA IRONIA DEL SURREALISMO EN QUE VIVIMOS LOS CUBANOS DURANTE ANOS. GRACIAS A EL Y SU SECCION DOMINICAL QUE NOS ALEGRO LA EXISTENCIA EN LA DUREZA DE LA DESINFORMACION DEL GOBIERNO.